Cómo cosechar tu propio maÃz
Su versatilidad convierte al choclo en uno de los alimentos más importantes para el ser humano. Además se utiliza para preparaciones muy diversas y con alto valor nutritivo.
El maÃz o choclo es una planta originaria de México y su popularidad a nivel mundial, la convierten en un producto indispensable para la elaboración de harinas y aceites. Sin embargo, es difÃcil encontrarlo de manera orgánica y, muy poco común plantarlo en los hogares debido a que esta especie distingue flores masculinas y femeninas y, por ende, es necesaria la polinización para que el maÃz brinde mazorcas. En esta nota te contamos algunos trucos muy simples para ayudarte en su cosecha.
1. Espacio: cualquier espacio, por más pequeño que parezca, puede servir para sembrar maÃz. Las extensiones reducidas pueden funcionar muy bien si se tienen en cuenta algunos cuidados especiales (como la polinización manual, que requiere poco tiempo). Incluso, se puede cultivar en macetas.
2. Variedades: existen muchos tipos de maÃz. Para saber seleccionar cuáles son los adecuados, hay que considerar clima, terreno y uso que vamos a darle, ya que no es lo mismo producirlo para comer que para fabricar harina. Es fundamental elegir una sola variedad porque si dos variedades se encuentran cultivadas con menos de un kilómetro de distancia entre ellas, puede ocurrir la polinización cruzada y eso, cambia las caracterÃsticas de los granos. Además, el maÃz necesita un suelo rico en materia orgánica y mucha exposición solar.
3. Reconocimiento: se debe aprender a diferenciar entre las espigas masculinas y las femeninas. Las flores masculinas son aquellas que aparecen en lo alto de la mata y, las femeninas, las que se encuentran debajo, junto al tronco y tienen los tÃpicos hilos o sedas. La fertilización consiste en que el polen de las masculinas llegue a las sedas de las femeninas.
4. Bloque: la plantación debe realizarse en bloque para ayudar a la polinización por la acción del viento, que no es efectiva cuando se planta en filas.
5. Manual: se debe colaborar manualmente en la tarea de llevar adelante la polinización de las flores. Esta se hace una semana después de que las mismas aparezcan y, en dÃas secos. Un tip para recordar es: recoger el polen en la mano y depositarlo en las sedas de la planta de al lado. Luego, resta esperar y ver crecer el maÃz. Generalmente entre la siembra y la cosecha, hay un periodo de demora de 130 dÃas.
Fuente: www.guiadejardineria.com